Hay tantos restaurantes y bares alrededor de Times Square como gente pasando por sus calles.
Hay propuestas gastronómicas para todos los gustos y para todas las edades. Desde los platos más tradicionales e históricos, hasta las nuevas delicias gourmet de los chefs más innovadores. Times Square invita a disfrutar con la barriga llena, incluso si se dispone de poco dinero y poco tiempo para degustar un plato elaborado.
Nueva York es una ciudad que nunca descansa y cuenta con una excelente variedad de ofertas culturales y atracciones turísticas que no se pueden dejar de visitar. Por lo general, los turistas deben elegir qué hacer y qué no hacer, según el tiempo del que dispongan. En muchas ocasiones, comer algo rápido en la calle es una buena opción para aprovechar al máximo el día.
Las comidas más baratas y típicas que se pueden encontrar en cada esquina de Nueva York son los hot dogs, los bagels, las pizzas e incluso unas deliciosas hamburguesas, que forman parte de la tradición de la ciudad.
En casi cualquier esquina de Manhattan podrás comer estas comidas rápidas con el mejor sabor y los valores más accesibles.
El precio de un hot dog ronda los 2 dólares, aunque siempre conviene preguntar antes de pedir ya que no es habitual que aparezca la cantidad y puede llegar a generar cierta incomodidad.
La pizza es otra opción que se suele encontrar en cualquier local de comida rápida, tienda o incluso en supermercados. La calidad en todos los locales es bastante similar ya que son porciones grandes y de preparación aceptable, aunque no hay una gran variedad de sabores para elegir. El precio por porción es de unos 3 US$.
Para los amantes del café, Nueva York es el escenario perfecto, ya que es muy común ver a personas de todas las edades caminando por la calle con un vaso grande para llevar. Incluso para quienes prefieren algo frío, los batidos de frutas grandes con mucho hielo son una opción fácil de encontrar en las tiendas on-the-go que ayudan a combatir los días muy calurosos.
Es cierto que, aunque este tipo de comida se puede encontrar en cualquier parte, hay ciertos sectores de la ciudad en los que encontrarás un menú más específico y las especialidades típicas de alguna región del mundo. Entre ellos se encuentran Chinatown y Little Italy.
Chinatown es un barrio de la ciudad de Nueva York, famoso por ser un enclave con una gran población de inmigrantes chinos. Manhattan es uno de los nueve barrios conocidos con esta denominación que existen en Estados Unidos, con una densidad de población de casi un millón de residentes. Allí se puede disfrutar de la más amplia variedad de comida asiática, principalmente de la antigua cultura china y del sudeste asiático. Los platos más habituales son los dumplings asiáticos, los bollos de cerdo y los fideos cortados a mano.
Además, las concurridas aceras están llenas de tiendas de recuerdos, tiendas de té de burbujas y mercados que venden de todo, desde pescado fresco y seco hasta hierbas y especias.
Esta zona es un área aproximada de 1,5 kilómetros de Norte a Sur y 3 kilómetros de Este a Oeste dentro de la isla de Manhattan, aunque los turistas solo visitan el antiguo centro de Chinatown, las intersecciones de las calles Canal con Mott y Mulberry, así como la intersección de las calles Pell y Doyers.
Por su parte, Little Italy es un barrio llamado así porque en sus orígenes estuvo poblado por un gran número de inmigrantes italianos. Aunque en la antigüedad tenía una extensión mayor, actualmente se limita al tramo de Mulberry Street entre Broome y Canal. Esta zona está repleta de restaurantes cuyos clientes son en su mayoría turistas que quieren disfrutar del sabor de las buenas pizzas y pastas típicas.
La “Fiesta de San Gennaro” es muy típica de Little Italy y tiene lugar durante once días cada septiembre.
Para quienes quieran disfrutar de las nuevas delicias gourmet y de los chefs más innovadores, Times Square está repleta de restaurantes turísticos, famosos y muy bien valorados por los críticos gastronómicos como Planet Hollywood y el Hard Rock Café. En estos casos, los precios suelen ser bastante elevados y muchos ofrecen una gran variedad de comida típica americana, con una decoración maravillosa y ambientes impresionantemente cuidados.